El virus COVID-19 aislado en heces puede ser infeccioso
Fuente: Medscape, Brenda Goodman (resumido), 27-05-2020
Un nuevo estudio ha demostrado que el virus COVID-19 aislado en heces de un paciente enfermo puede infectar células en una placa Petri.
La investigación es un paso más para probar una nueva ruta de transmisión de la infección. Si lo confirman futuros estudios, significaría que las personas podrían enfermar al estar en contacto con pequeñas cantidades de heces de personas infectadas (transmisión fecal-oral), como en el caso del cólera y la hepatitis.
Los síntomas gastrointestinales como náuseas y diarrea son comunes en pacientes con COVID-19. Estudios previos han demostrado que aproximadamente la mitad de los pacientes con COVID-19 presentan el virus en heces e incluso mucho después de que el virus ya no se detecte en muestras nasofaríngeas.
Científicos en China que aislaron el virus de las heces de un paciente con COVID-19 descubrieron que podía infectar células vivas. Cuando observaron las células infectadas al microscopio electrónico pudieron ver las células liberando partículas virales que presumiblemente estaban listas para infectar a otras células, destacando el potencial de propagación de la enfermedad por esta vía.
Los investigadores también observaron que había aproximadamente 100 veces más virus en las heces que en las muestras nasofaríngeas de los pacientes.
La cuestión es si esta observación es extrapolable a todos los pacientes de COVID-19.
En este momento, no hay suficientes datos para afirmar tal cosa. Los estudios con muestras de virus de heces se han realizado con pacientes muy enfermos. No hay forma de saber si las personas con infecciones más leves generarían tanto virus o lo eliminarían en grandes cantidades. Este tipo de estudios además han sido experimentales, es decir, los científicos juntaron células y virus en una misma placa Petri para ver qué pasaría, y esta situación no refleja la transmisión del mundo real.
Aún así, hay que considerar que en ciertos entornos la propagación de la enfermedad a través del contagio por las heces podría ser una vía de transmisión importante.
No obstante, actualmente la principal vía de propagación del virus es por la tos y los estornudos. El contacto con superficies contaminadas (transmisión de fómites) también puede estar jugando un papel importante.
Hasta que tengamos más datos, de todos modos, no es mala idea tener cuidado en los baños compartidos, bajando la tapa del inodoro antes de tirar de la cadena para reducir la creación de aerosoles desde el interior.
Por último, es fundamental lavarse las manos durante al menos 20 segundos después de ir al aseo, cambiar el pañal de un bebé o ayudar a un niño en tales menesteres.